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La Paz, Bolivia,julio 2011
Año 2 Nº6
Periódico mensual para el área rural
EDICIÓN ESPECIAL

Este pueblo ostenta orgullo el título ejecutorial que reconoce el derecho propietario del área
TCO Mosetén: el primer territorio indígena titulado en La Paz

La TCO recibió el documento de propiedad en 2001. La demanda por el territorio comenzó en la década de 1990. La organización indígena trabajó sin descanso para hacer realidad este anhelo.

El pueblo indígena Mosetén ostenta un título: vive en la primera tierra comunitaria de origen (TCO) titulada en las tierras bajas de La Paz. El reconocimiento corresponde a 2001, aunque los representantes de la Organización del Pueblo Indígena Mosetén (OPIM) recuerdan que la lucha para completar este trámite jurídico comenzó en la década de 1990.

El 21 de agosto de 1994 los mosetenes fundaron la OPIM. Dos años después, en 1996, la organización participó del movimiento que reclamaba una nueva ley de tierras en Bolivia. Esta demanda se hizo realidad con la promulgación de la Ley INRA (Instituto Nacional de Reforma Agraria). En esa misma gestión, los indígenas solicitaron el reconocimiento de sus derechos territoriales y organizaron la Marcha por el Territorio, el Desarrollo y la Participación Política de los Pueblos Indígenas. Como resultado de esta manifestación, el territorio mosetén recibió la denominación de TCO.

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el primer territorio indígena titulado en La Paz

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Pero la titulación de la propiedad colectiva indígena quedó pendiente. “Después de largos años, nuestra TCO recibió el título propietario en el año 2001 [título ejecutorial TCONAL 000020, 11 de abril]”, señala una publicación mosetén presentada en el conversatorio organizado por la Fundación TIERRA en La Paz, en abril de este año. Encuentro en el que participaron indígenas de tres TCO de tierras bajas y representantes de comunidades interculturales que colindan con estos territorios.

En todo caso, el esfuerzo indígena tuvo sus frutos. El título ejecutorial mosetén corresponde al primero que el gobierno otorga en el departamento paceño y abarca una superficie de 100.831 hectáreas, de un total demandado de 133.029,13 hectáreas.

El área mosetén también ocupa algunos sectores de Cochabamba y Beni. “[La TCO] está geográficamente separada en dos zonas, la primera denominada Covendo y la segunda Santa Ana”, en los municipios de Pablos Blancos (La Paz), Morochata (Cochabamba) y Moxos (Beni), se lee en el sitio web de la Confederación de Pueblos Indígenas de Bolivia (CIDOB).

La TCO Mosetén no controla un territorio unificado. Está dividida en cuatro secciones separadas entre sí por asentamientos de colonizadores, quienes disputan la propiedad del suelo con sus pares indígenas. En el espacio ocupado por las comunidades interculturales está asentado Palos Blancos, importante pueblo por el que transitan indígenas y migrantes cotidianamente.

Actualmente, la TCO alberga a unos 3.400 indígenas, según datos del INRA, quienes viven en ocho comunidades: Covendo, Muchane, Simay, San Pedro de Cogotay, San José, Inicua, Villa Concepción y Santa Ana, estas dos últimas funcionaron como misiones franciscanas desde el siglo XVIII; como resultado de ese contacto,  los mosetenes conservan la fe católica.

Además, los mosetenes intentan recuperar sus antiguas creencias. La fe de este pueblo se basa en la existencia de un dios creador, Dojit y en la certeza de que todo lo que los rodea (animales, plantes, accidentes geográficos y otros) tiene vida propia.

Los vecinos

En esta TCO, al igual que en otros territorios de tierras bajas, la convivencia con los vecinos colonizadores no es sencilla. Las disputas por el derecho propietario de las zonas de colindancia son constantes.

Los colonos comenzaron a llegar al norte paceño en la década de los 60; en los primeros años, el arribo de migrantes obedeció a los planes impulsados por el desaparecido Instituto Nacional de Colonización (INC).

En la actualidad, las comunidades interculturales de la región ocupan 136 asentamientos afiliadas a la Federación Agroecológica de los Yungas (Faecap). De acuerdo con el INRA, en este sector habitan unos 17.250 campesinos.

En los sectores de colindancia con la TCO Mosetén, tanto indígenas como migrantes se dedican principalmente a labores de agricultura y explotación forestal, entre otras tareas.

Debido a la fuerte presión y demanda por la propiedad del territorio, la zona sufre daños ambientales y, en los últimos años, el nivel de los ríos y la disponibilidad de presas para la caza y pesca ha disminuido, coindicieron antiguos pobladores de la TCO Mosetén y de las comunidades interculturales.

La historia de la colonización no es nueva en este territorio y en todo el norte del país. A mediados del siglo XIX y principios del XX la explotación de la quina (planta que produce la quinina) y la goma llamaron la atención de criollos y extranjeros, quienes se asentaron en la zona. Estos migrantes construyeron haciendas y decenas de pueblos en la Amazonia.